
Este martes me tocó participar de la 8ª Conferencia organizada por SERVIR-D en Santo Domingo, República Dominicana. Este año, el tema era el Voluntariado Corporativo, específicamente “Voluntariado corporativo y su impacto en las empresas y sus colaboradores”.
Para eso, SERVIR-D quiso contar con el expertise de Voluntare. Este año no solo decidieron sumarse a la red sino que también cumplían 20 años de actividad, 20 años de promover el voluntariado en la sociedad dominicana. Para eso, querían celebrarlo apostando a seguir aumentando la participación de las empresas en el reto de involucrar a la ciudadanía en la solución de los retos sociales y ambientales.
Mi desafío como conferencista fue poder transmitir todo lo que el voluntariado corporativo puede aportar, no solo a la sociedad y a las organizaciones sociales, sino a las empresas.
A través de los estudios e investigaciones que realizamos en Voluntare pude compartir con casi 100 expertos en Recursos Humanos, Talento Humano y Responsabilidad Social Corporativa, de empresas y organizaciones dominicanas cómo el voluntariado corporativo puede ser una estrategia más para promover un mejor clima laboral, el desarrollo de competencias, el compromiso y sentido de pertenencias entre la plantilla.

Pero los datos no son nada sin los testimonios, las historias de personas que respaldan lo que los estudios nos demuestran estadísticamente. Porque no hay nada mas motivador e inspirador que una voluntaria, que a su vez ocupa un cargo gerencial en su empresa, dirigiéndose a la audiencia diciendo “atrévanse, no se van a arrepentir. Mi equipo tuvo muchos desafíos de trabajo que no hubiéramos superado juntos si antes no hubiéramos participado juntos en proyectos de voluntariado.” Y esto fue lo que ocurrió en el maravilloso panel que también me tocó moderar. Ancris Lied, 2da. vicepresidente de Segmentos Comercio y Microfinanzas del Banco BHD, participó en su calidad de voluntaria, pero también habló desde su rol de líder en la organización… y nos emocionó a todos.
Así como escuchar a la más alta directiva de Experiencia del Colaborador de un importante banco dominicano diciendo que su reto más grande fue “atreverse” pero ahora que lo han hecho no se arrepienten. Que mediante el programa de voluntariado corporativo están identificando talento, que detectar aquellos colaboradores que tienen desarrollado el liderazgo y que eso les sirve para alimentar la estrategia de talento humano; que el equipo de RSE y de Experiencia del Colaborador trabajan codo a codo para el programa de voluntariado porque “así se logra garantizar el impacto social y también fortalecer a los equipos, identificar talento y desarrollar competencias”. Maripily Peralta, vicepresidente de Experiencia Colaborador del Banco Santa Cruz, nos decía que el próximo reto es cómo sumar a las familias.
Y no quedo fuera la voz de las organizaciones sociales. Porque nada de esto es posible sin ellas. Jorge Fernández Winter, director General de TECHO en República Dominicana y Haití, expuso cómo ellos miden y registran los aprendizajes de los voluntarios, cómo recogen y sistematizan datos sobre el impacto logrado para que las empresas puedan reconocer el voluntariado. Porque al voluntariado hay que reconocerlo y cada vez que logramos transformar la realidad, nos decía Jorge, “hay que tomarse el tiempo para celebrar”. De esta forma, el compromiso se renueva y se puede seguir profundizando la participación hacia nuevos proyectos, involucrando a los colaboradores en varias instancias de los proyectos integrales de las organizaciones, como en la identificación de necesidades de los colectivos hasta en la implementación de los proyectos de intervención.

Taller práctico
Pero esta jornada no terminó ahí… porque 40 profesionales gestores de voluntariado de empresas y organizaciones fueron parte de un taller teórico práctico en el que compartimos algunas claves sobre cómo pasar a la acción. Profundizamos sobre los pasos necesarios para diseñar estrategias de voluntariado corporativo, procesos para promover y evaluar el desarrollo de competencias a través del voluntariado, compartimos pautas para promover el liderazgo a través del voluntariado mediante programas de embajadores o intraemprendedores y acciones para involucrar a la Dirección y niveles gerenciales.
Pero lo más importante, todos ellos se comprometieron al menos a realizar 3 acciones nuevas dentro de sus programas de voluntariado corporativo. La semilla está plantada y estoy segura de que va a florecer. En los próximos meses, muchos voluntarios van a recibir encuestas para escuchar sus voces, empleados que no se lo esperan serán consultados sobre sus inquietudes solidarias y ambientales, cientos voluntarios van a ser celebrados y reconocidos y nuevas organizaciones van a recibir llamados para implementar alianzas.
Gracias a todos los gestores de voluntariado que participaron porque sin ellos estos programas no existirían, gracias por su compromiso con profesionalizar el sector… gracias por buscar hacer “más y mejor voluntariado corporativo”. Y, sobre todo, gracias por recibir tan cálidamente a Voluntare en su casa. Ser parte de la red nos hace llegar más lejos.
