Voluntariado Corporativo en América Latina

El voluntariado corporativo se ha convertido en un ejemplo muy claro y eficaz de lo que tantas veces se pide a la hora de afrontar problemas complejos de nuestro mundo: la unión de empresas (con sus empleados), las ONG y los organismos públicos trabajando codo con codo en tratar de paliar situaciones de poblaciones vulnerables, del medio ambiente, de colectivos excluidos o en riesgo de exclusión, etc.

Hace unos años tuve la oportunidad de codirigir un estudio que comparaba la situación del voluntariado corporativo en España y en América Latina y se percibían diferencias relevantes (en el foco o en el rol del sector público, por ejemplo) pero también importantes similitudes. Estos años que han transcurrido desde entonces, han servido para consolidar este tipo de voluntariado a ambos lados del Atlántico y para situar ambas regiones como los motores del voluntariado corporativo en el mundo. De hecho, muchos de los proyectos de voluntariado de las multinacionales españolas nacieron en América Latina, muestra del espíritu y la energía provenientes de los diversos países de América Latina.

En Iberoamérica encontramos proyectos de altísimo impacto, empresas y ONG con programas de voluntariado corporativo muy sólidos, universidades que están formando profesionales en este campo e iniciativas de trabajo en red que nos están permitiendo avanzar a un ritmo envidiable. Todo esto nos hace sentirnos muy optimistas en cuanto al futuro del voluntariado corporativo en la Región.

Esperamos que el Congreso Iberoamericano de Voluntariado Corporativo que arranca en Perú suponga el espaldarazo definitivo a este tipo de voluntariado y permita alcanzar un impacto todavía mayor tanto en la empresa como en la comunidad, tal y como supuso el Congreso Español de Voluntariado Corporativo de hace seis años del cual surgió Voluntare.

Juan Ángel Poyatos (Coordinador general de Voluntare)