La campaña ‘Voluntarios frente a la COVID’ de Iberdrola está permitiendo a sus voluntarios corporativos movilizarse a pesar del confinamiento. Desde que se decretó el Estado de Alarma, provocada por la pandemia del coronavirus, 1.000 empleados de Iberdrola se han implicado en más de 20 iniciativas de voluntariado en España. De manera altruista y desde sus casas, los voluntarios están colaborando para ayudar a afrontar esta crisis sanitaria.
Desde hace semanas, un nutrido grupo de sus voluntarios corporativos está participando en proyectos muy variados: fabrican materiales de protección, acompañan a los colectivos más vulnerables, animan al personal sanitario, cuentan cuentos para apoyar a familias… incluso donan dispositivos a residencias o cantidades económicas para auxiliar a colectivos en situación de exclusión.
Mascarillas accesibles para personas sordas
En colaboración la Fundación para el Fomento del Desarrollo y la Integración (FDI), Iberdrola ha puesto en marcha un proyecto inclusivo para la fabricación de mascarillas accesibles para personas sordas. Lo que las hace accesibles es que permiten la lectura labiofacial y, con ella, la comunicación.
Iberdrola está enviando packs a 150 voluntarios, con el material y las instrucciones para su confección. Una vez elaboradas, se reparten entre la población sorda a través de las diferentes federaciones. Con este programa, la empresa espera poder aportar un total de 5.000 mascarillas.
Además, en el ámbito sanitario, la compañía también ha organizado y apoyado una red interna de voluntarios para fabricar máscaras protectoras con impresoras 3D y mascarillas faciales. A continuación, se han distribuido en hospitales, residencias de mayores y, también, residencias para personas con discapacidad intelectual.
Acompañamiento a los más vulnerables
La iniciativa ‘Sonrisas frente al coronavirus‘, puesta en marcha con FDI y Voluntariado y Estrategia, combate la soledad de las personas mayores que se encuentran en residencias y que no pueden recibir visitas de sus familiares. La operativa del proyecto, que ya cuenta con la participación de cerca de 450 voluntarios de Iberdrola, consiste en establecer una correspondencia virtual entre los voluntarios y los residentes.
Además, los empleados de Iberdrola también están donando dispositivos electrónicos para que las personas mayores aisladas en hospitales y residencias puedan contactar con sus familiares. Verse las caras con sus personas más queridas alegra sus corazones y les infunde nuevos ánimos.
Por otra parte, más de 25 voluntarios Iberdrola están acompañando telefónicamente a personas con discapacidad intelectual y/o enfermedad mental. En colaboración con distintas entidades, como la Fundación Adecco o la Fundación Juan XXIII, han establecido una rutina diaria de conversaciones telefónicas para acompañar a estas personas sobrellevar las penalidades del confinamiento.
De cuenta cuentos a donaciones
Otra iniciativa innovadora en la que están participando los voluntarios Iberdrola es el ‘cuenta cuentos’ organizado para niños y adultos con discapacidad intelectual. Los empleados graban vídeo leyendo obras infantiles adaptadas, siguiendo las pautas de lectura fácil. Esos textos sencillos mejoran la comprensión lectora de personas con dificultades y resultan de gran ayuda para sus familias.
Para agradecer al personal sanitario el esfuerzo que están haciendo frente a la crisis desde los distintos hospitales y centros sanitarios de España, los empleados Iberdrola y sus familias les están haciendo llegar mensajes: dibujos y cartas de ánimo y agradecimiento, no solo por su lucha, también por su humanidad en el cuidado de las personas aisladas.
Iberdrola ha puesto en marcha también una campaña de donación entre su plantilla. Lo ha hecho a través de la organización Aldeas Infantiles, dirigida a las familias más desfavorecidas con menores a cargo. Las donaciones económicas, que ya suman cerca de 20.000 euros, se transforman en vales de comida para este colectivo.
Plan de acción global Iberdrola contra el COVID-19
Las iniciativas de voluntariado de Iberdrola, socio de la red Voluntare, forman parte de su plan de acción global Iberdrola contra el coronavirus COVID-19. A través de él, la compañía tiene como objetivo, no solo garantizar el mantenimiento y la calidad de suministro en este contexto, si no también dar respuesta a las necesidades de sus grupos de interés.
En este contexto se enmarca la donación de material sanitario por valor de cerca de 25 millones de euros. O el refuerzo energético de infraestructuras esenciales, hospitales e instalaciones medicalizadas. O la puesta en marcha de medidas dirigidas a los clientes más vulnerables a esta crisis…
