En Voluntare creemos en el compromiso de los jóvenes con las causas sociales. Sin embargo, es un reto encontrar la forma de conectar con ellos de una manera que realmente les impacte.
La llamada Generación Z, con edades comprendidas entre los 8 y los 23 años aproximadamente, tiene una gran sensibilidad hacia temas como el medio ambiente y el impacto social, pero el término "voluntariado" no siempre logra captar su atención.
Por eso desde Voluntare propusimos analizar a fondo qué es lo que realmente motiva a esta generación a actuar, qué buscan en las empresas y entidades sociales, y cómo podemos engancharles de manera efectiva en actividades de voluntariado.
Grupo de trabajo: "Activar la generación Z"
Con el objetivo de analizar estos temas, se puso en marcha el grupo de trabajo “Activar la Generación Z”. El estudio, basado en un cuestionario con 220 respuestas de personas pertenecientes a esta generación, arrojó conclusiones reveladoras sobre las preferencias de los jóvenes en cuanto a actividades sociales y de voluntariado.
- Impacto tangible y aprendizaje: Los jóvenes de la Generación Z no buscan simplemente participar por participar. Prefieren actividades que tengan un impacto claro y tangible en la sociedad y en el medio ambiente. Además, valoran las oportunidades donde puedan poner en práctica sus conocimientos y aprender habilidades nuevas, ya que buscan un crecimiento personal y profesional a la vez que contribuyen a una causa.
- Trabajo en equipo y presencialidad: Un sorprendente 91% de los encuestados manifestó preferir actividades en equipo, lo que refleja su deseo de compartir experiencias y trabajar de forma colaborativa. Además, el 93% prefiere participar en actividades presenciales, lo que indica que, aunque están hiperconectados digitalmente, valoran las conexiones humanas y el contacto directo.
- Compromiso puntual: En cuanto al tipo de compromiso, un 63% de los jóvenes prefieren actividades puntuales. Esto sugiere que, aunque están interesados en involucrarse, buscan opciones que no interfieran en su rutina diaria o compromisos a largo plazo.
Para las organizaciones que desean atraer a esta nueva generación, es clave adaptar los programas de voluntariado a estas preferencias. Las actividades deben ofrecer un sentido de logro, estar alineadas con sus valores y proporcionar experiencias de aprendizaje y desarrollo personal. Solo así podremos lograr que la Generación Z se sienta verdaderamente conectada con el voluntariado corporativo.
El desafío está en nuestras manos: innovar y transformar el voluntariado para crear experiencias que conecten, inspiren e involucren a toda una nueva generación.
Este estudio ha sido posible gracias al trabajo conjunto de entidades como Work for Social, Fundación Botín, U4Impact, Fundación Mahou San Miguel, Ayuda en Acción, Fundación Trascender, AIPC Pandora, Coca Cola Europacific Partners, Fundación Bertelsmann y +Orange, todas ellas socias de la Red Voluntare, a la que pertenecen en la actualidad más de 120 empresas, organizaciones sociales y educativas.
¡Gracias a todas por participar!
