La mañana está fresca y brumosa en Madrid, lo normal para un 11 de febrero. Son las nueve de la mañana y comienzan a llegar al Campus Iberdrola Ignacio, Gloria, Paz, Asier, Rocío… son voluntarios corporativos, catorce en total. Lo primero que van a hacer es presentarse porque no se conocen entre ellos. No solo trabajan en distintas áreas y departamentos. Además, lo hacen en cinco empresas diferentes. Hoy van a ser un equipo con una misión común: ayudar a Adalab a mejorar su bolsa de empleo… el primer Maratón ProBono de Voluntare está a punto de empezar.
El marco elegido no es casual. Estamos en el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia y vamos a concentrarnos en el Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) número 5: Igualdad de Género. Los empleados voluntarios provienen de cinco de nuestros socios directores: Repsol, Iberdrola, ”la Caixa», Telefónica y Endesa. Cuentan con perfiles profesionales variados y reúnen conocimientos y experiencia en tecnología, marketing, estrategia de negocio, ventas y recursos humanos, entre otros campos.
Iberdrola nos da la bienvenida a su Campus. Tampoco es casual el espacio. Esta empresa está muy comprometida con la igualdad. Es un eje fundamental de su Responsabilidad Social Corporativa. Queda mucho por hacer. De acuerdo a Begoña Barbera, su responsable de proyectos sociales, “sigue habiendo ciertas áreas, como la tecnología, la ingeniería, la ciencia… en las que sigue existiendo una brecha de género”. Por eso, explica, “desde Iberdrola tratamos de impulsar vocaciones en mujeres y niñas para atraerlas a sectores como el energético”.
La coordinadora de Voluntare, Benedetta Falletti, expone el por qué de la jornada. Ya han recibido una formación previa. Ahora es momento de conocer información de la problemática a enfrentar. A continuación, nos organizaremos en tres equipos multidisciplinares y multiempresa. Es decir, en cada uno de ellos habrá personas de diferentes perfiles profesionales y procedentes de distintas empresas. Y seguiremos un proceso diseñado para finalizar en un producto de consultoría final: un plan de acción.
Mejorar el acceso de mujeres a empleos tecnológicos
Conocemos a Adalab. Esta organización trabaja con mujeres que no han tenido acceso a oportunidades laborales de calidad. Les ofrece la posibilidad de iniciar una carrera profesional en el sector tecnológico. ¿Cómo? A través de oferta formativa y un programa de empleo, les proporciona capacitación y la oportunidad de incorporarse a empresas. De esta forma, además de acceder a un puesto de trabajo, aportan diversidad a su sector.
Los voluntarios corporativos que participan en el primer maratón probono de Voluntare se van a centrar en su programa de empleo. Más concretamente, en mejorar su bolsa de empleo desde el punto de vista de servicios de recruiting para las empresas. Nos tomamos un café rápido para que los tres equipos conformados se familiaricen y activen sus neuronas. Comienza la acción.
Cada equipo elabora propuestas de valor. Dispone para ello de una hora y media. A continuación, toca presentarlas para que todos los presentes puedan aportar. Una pausa para comer e intercambiar puntos de vista y retomamos la sesión con el análisis para mejorar el modelo de negocio. Finalmente, solo resta convertir ese material en un plan con acciones concretas.
La meta del maratón probono: misiones cumplidas
El ambiente ha sido muy dinámico, los equipos lo han dado todo y las personas han aportado multitud de ideas y perspectivas que han enriquecido el resultado final. En Adalab nos trasladan su agradecimiento por el compromiso demostrado en el día de hoy y afirman: “hemos aprendido muchísimo y nos vamos con un montón de ideas y con ganas de llevarlas a cabo”.
La fórmula que hemos utilizado hoy está basada en competencias y es beneficiosa no solo para la entidad social que lo recibe. También ayuda a los profesionales que participan como voluntarios corporativos. Desarrollan competencias en entornos diferentes a los que están acostumbrados. Lo avalan diferentes estudios: mejoran como profesionales y como personas. Y con ellos, el ambiente laboral y la productividad de las empresas en las que trabajan.
Al cierre de la jornada, los comentarios de los voluntarios son buena prueba de ellos: “aprendizaje”, “inspiración”, “una metodología muy buena para entrar en modo creativo”, “enriquecedor colaborar con colegas de otras empresas”, “expectativas 100% cumplidas”, “con interés por saber cómo implementará Adalab lo trabajado hoy”…
Misiones cumplidas. La de lograr impacto en la entidad beneficiaria y mejorar habilidades en los voluntarios. También la del Área de Innovación de Voluntare: experimentar para generar conocimiento en el ámbito del voluntariado corporativo. En palabras de Benedetta Falletti, coordinadora de Voluntare, «hemos culminado un proyecto piloto en el que todos hemos aprendido. Y con el elevado valor añadido que le aporta el factor multiempresa, que ha sido posible gracias a la complicidad de nuestros socios directores».
¡Muchas gracias a todos, personas y organizaciones!
