
Nespresso y Volies pueden parecer dos empresas muy distintas, pero tienen en común la filosofía y valores B Corp de promover un impacto positivo en la sociedad y el medio ambiente. Se conocieron en los encuentros que B Lab desarrolla en España para promover el crecimiento de alianzas entre empresas de alto impacto social. Juntas han aprovechado la poderosa herramienta que es el voluntariado corporativo para aliarse y realizar acciones solidarias y de inclusión.
Nespresso: una gran trayectoria de compromiso ambiental y social
El firme compromiso con la sostenibilidad de Nespresso ha sido un camino de progreso y mejora constante patente a través de los años. Su programa AAA Sustainable Quality™, en colaboración con Rainforest Alliance y Fairtrade, lanzado hace más de 20 años en 2003, trabaja con más de 168.000 caficultores en 18 países, promoviendo prácticas agrícolas sostenibles y mejorando las condiciones de vida de las comunidades cafetaleras. Reconcilia la idea de que el café de alta calidad puede ser fruto de una vida sostenible y próspera para los agricultores y sus comunidades, a la par que se conserva el medio ambiente.
Además, la compañía ha invertido significativamente en proyectos de reforestación y agricultura regenerativa, con el objetivo de alcanzar cero emisiones netas a partir de 2035.
En el ámbito de la economía circular, Nespresso lleva más de 15 años facilitando el reciclaje de cápsulas. Actualmente, los clientes tienen a su disposición más de 7.400 puntos de recogida en todas las provincias de España. Entre las distintas iniciativas llevadas a cabo destaca el proyecto Arroz Solidario, que transforma los posos de café reciclados en compost para cultivar arroz en el Delta del Ebro, donado posteriormente a bancos de alimentos.
En 2022 se convierte en compañía B Corp, dando un paso más en este compromiso y uniéndose a un movimiento global de empresas que buscan equilibrar las ganancias con el propósito y generar un impacto positivo en el mundo, cumpliendo con altos estándares éticos, de transparencia y responsabilidad social y ambiental. Un camino de mejora continua con el objetivo de reducir la huella de carbono en su cadena de valor, alcanzar cero emisiones netas, continuar con la transición hacia una agricultura regenerativa, seguir avanzando en circularidad y mejorar la resiliencia de las comunidades caficultoras.