Según Conexión Colombia – una ONG de carácter social que, entre otros, tiene un programa para conectar la oferta de voluntarios corporativos con fundaciones que los requieran-, en el país ya son varias las compañías las que tienen iniciativas de este tipo. Aunque no hay datos consolidados, un pequeño censo realizado por la organización en 6 grandes compañías con presencia local arrojó que, a octubre del 2012, estas contaban con 8.086 empleados que donaban su tiempo, una cifra que da luces de la buena acogida que tiene el voluntariado entre los trabajadores colombianos.
«Las empresas se están dando cuenta de que es algo más estratégico que solo poner a los empleados a realizar una actividad y lo están empezando a hacer más escalable, con mayor impacto y trascendencia», dijo Paola Avendaño, coordinadora de Voluntariado Corporativo en Conexión Colombia.
Entre los ejemplos que destaca Conexión Colombia está el caso de Pacific Rubiales Energy, que enmarca su programa de voluntariado en su estrategia de sostenibilidad y promueve, mediante alianzas público-privadas, que sus empleados se involucren en su causa social durante su horario de trabajo. «Lo hacemos porque la compañía procura que los tiempos libres de los empleados sean para su familia», dijo Juliana Sardi, coordinadora de sostenibilidad en la compañía. Actualmente poseen 80 voluntarios, aunque tienen la meta de involucrar a la mitad de su nómina en la causa.
Por su parte, el programa de voluntariado de GM Colmotores tiene 12 años y es canalizado a través de la Fundación Chevrolet. Ha tenido tanto éxito que, durante el 2012, 950 empleados donaron 11.000 horas de su tiempo libre para beneficiar a más de 3.000 personas en condición de vulnerabilidad.
Respecto a cómo motivan los empleados a involucrarse, Fernando Alonso, director ejecutivo de la Fundación Chevrolet, explicó: «les damos un reconocimiento simbólico, por ejemplo, anualmente premiamos al ‘Solidario del año’, el voluntario que más horas donó y que más motivó a otros a unirse. También premiamos el proyecto de voluntariado que consiguió los mejores resultados y donde más personas participaron».
De afuera hacia adentro
Aunque el voluntariado es, en esencia, una herramienta de Responsabilidad Social, sus ventajas también se extienden al interior de las compañías. «Se ha demostrado que la salud mental de los trabajadores quienes son voluntarios es mejor que la quienes no lo son; además, se genera un empoderamiento con la empresa y se desarrollan habilidades personales como liderazgo, saber establecer y mantener relaciones con otras personas, entre otras que son muy útiles para la cotidianidad laboral», afirmó María Teresa Gnecco, de la Asociación Internacional de Esfuerzos Voluntarios Colombia (IAVE).
En esta misma línea de pensamiento, Mauricio López, consultor en Talent Management de Mercer, dice que el voluntariado también garantiza un mejor clima laboral. «Le da al empleado herramientas para que se sienta más satisfecho dentro de la organización, pues le permite desarrollar su espíritu altruista», declaró.
Es así como cada día son más las entidades con presencia en Colombia que se alinean con las tendencias mundiales y empiezan, cada una desde su público objetivo, a cambiar el mundo, impactándolo positivamente, un empleado a la vez.
Fuente: Cristina Bustamante. Redacción Portafolio.co